Grupo la Toja, que una vez más demostró una enorme profesionalidad y buen hacer, y la música corrió a manos de DiscoShow Espectáculos, que consiguió que todos los invitados bailaran hasta la madrugada. El día anterior a su boda había estado lloviendo en la Posada y cuando los novios vinieron a ver cómo estaba quedando todo, decidimos que en función de cómo amaneciera al día siguiente, montaríamos en cocktail dentro o fuera. Lo ideal hubiera sido que el cocktail se celebrara en las terrazas de la Posada, pero el sábado el día se despertó con llovizna y mucha humedad, y consideramos que no era adecuado hacer a la gente subir a las terrazas con el suelo tan mojado. Por lo tanto, montamos el cocktail en la cristalera del Pabellón. Los novios querían que la decoración de su boda fuera toda en tonos verdes, blancos y naranjas, y sobre todo, muy campera. Por eso, hicimos este protocolo a la entrada al Pabellón en unas pacas de paja con unos grandes cubos de hojalata con naranjas. 
En el momento del cocktail por fin pudimos estrenas nuestros nuevos puestos temáticos, y en esta ocasión pusimos uno para el buffet de quesos, otro con aceitunas y surtido de aceites y el último con el cortador de jamón. Quedaron preciosos y fueron todo un éxito entre los invitados. 
En cuanto a la mesas, Loreto y Álvaro eligieron la mantelería verde de tela de saco, y encima pusieron un mantel blanco. Lo más original de la boda fue la mesa de los novios, que era una única mesa larguísima donde se sentaron ellos con todos sus amigos, venidos de todas partes de España. 
La minuta era la «comecocos», en tonos narajas 
Y los centros de flores, preciosos, eran en tonos naranja y verdes, a juego con el resto de la boda 
Media hora antes de que llegaran los invitados, ¡salió el sol! Y aunque estuvo toda la tarde amenazando lluvia, justo en el momento del cocktail lucía el sol y las temperaturas eran más suaves. Así que rápidamente los camareros desmontaron los puestos temáticos y los sacaron al jardín del Palomar y el cocktail se pudo trasladar al exterior, donde los invitados sin duda pudieron disfrutar del magnífico día. 
Y lo mejor es que los novios pudieron hacerse su reportaje fotográfico en los jardines de la Posada, con unas fotos preciosas y muy naturales que les hizo una fotógrafa amiga suya. 
Y por nuestra parte no nos queda más que darles la enhorabuena una vez más y las gracias por haber confiado en nosotros en un día tan importante. Nos alegramos mucho del excelente resultado y esperamos que nos podamos seguir viendo para que, sobre todo, ¡nos sigáis contagiando con vuestra alegría! La Posada Real del Pinar www.laposadadelpinar.com]]>