La llegada de la novia del brazo del padrino fue, como siempre, uno de los momentos más emotivos de la tarde. Y en cuanto acabó la ceremonia, ¡se terminó la lluvia! Lo que permitió que el cocktail se celebrara en las terrazas de la Posada. Como María y Miguel querían una boda relacionada con la música, el protocolo se montó sobre vinilos antiguos. Las mesas eran preciosas con mantelería de flores intercalada con mantelería verde. Los centros muy coloridos y olían fenomenal! La cena a cargo del Grupo la Toja fue riquísima, con un lechazo espectacular. Las minutas tenían forma de pergamino, envueltas con un lazo rojo. Después de la cena, todos los invitados pasaron al Palomar para bailar hasta el amanecer de la mano de DiscoShow Espectáculos. Para tener un recuerdo de ese día, los novios colocaron un lienzo a la salida del Palomar para que los invitados pudieran dejar su huella marcada. ¡un detalle precioso! Una vez más muchísimas felicidades a esta espectacular pareja a la que espero volver a ver muy pronto!! La Posada Real del Pinar www.laposadadelpinar.com]]>